Se muestra difícil el largo proceder, ¿que hacer?, ¿para donde ver?, tratar solo de avanzar sin voltear atrás, muy difícil y pesada es la cuesta, cansado el camino y largo a la vez; como tener la fuerza y la frescura para seguir avanzando, como seguir como si apenas hubiera empezado esta carrera por tratar de llegar a hacer feliz, llegar a ese final tan deseado, a esa tranquilidad soñada, y que se encuentra justo en el final.
Trato de no ver, pero hecho una mirada de reojo, procurando no ver hacia a tras, pero es inevitable lo tengo que hacer, trato de no recordar, pero los sucesos son tan parecidos que me trae esos viejos recuerdos, que tanto atormentaron parte de mi infancia, y ahora aunque diferente la situación, muy parecida resulta la frustración; aunque con mas responsabilidad, pues ya no soy un niño; y de mi dependen otros tantos. Analizo a cada momento, una parte y la otra, tratando de ser objetivo, realista y claro, pero de mí se apodera la impotencia y el miedo a no poder hacer nada e imaginarme como un héroe que salva el mundo, pero sin conseguir, más que agachar la cabeza, y con lágrimas en los ojos, ver que no logro nada. Como tener la madures para no equivocarme, como tener la inteligencia para hacer lo correcto y la habilidad y fuerza para aceptar si me equivoco.
Volteo a todas partes buscando ayuda, sin conseguir ver a ese alguien que pueda ayudarme, ni un consejo, ni una baga idea de que hacer, ni una palabra, ni una palmada de apoyo, con este vacío que atraviesa el alma. Trato de buscar tranquilidad, para ver si eso me trae una visión mas clara, trato de escuchar el viento, para ver si en su paso, me dejara una respuesta, quiero escuchar las aves para ver si ellas con su canto lograran decirme algo, o si en el perro que atraviesa frente ami, en la curiosidad por ver si le doy algo, me diera una caricia con su lengua en mi mano, y sentir que hay alguien que me esta apoyando.
Es demasiada la frustración que llevo; quien dijo que esta vida era fácil, pero también, nunca dijeron que fuera tan difícil, ni que se tenia que aguantar a veces situaciones causadas por el mismo estrés y terceras personas. Y si a eso agregamos situaciones económicas y laborales, la cosa empeora un poco más. Tener serenidad para llegar a casa y mostrar una cara, fingiendo no pasa nada, por llevar la fiesta en paz, y tratar de tener una armonía. Aunque en ocasiones esa armonía no dependa de uno mismo si no de ese alguien que se supone ser tu otra mitad, y que hacer cuando esa otra parte no tiene el mismo plan de vida y se deja arrastrar por la frustración y el estrés. Como llevar una fiesta en paz, si la armonía que tratas de construir es obstaculizada por ese otra persona, por ese estrés que siente, por ese coraje que no puede cargar y que busca menor provocación para estallar. Como lidiar con eso, como seguir soportando lo que una carga y con otro tanto mas, como hacerle…
Quiero gritar y tratar de desahogarme, pero no lo puedo hacer, el nudo de mi garganta me lo impide, haciéndome tragar todo ese sentimiento y reprimiéndolo en mi corazón, ahogando mi alma y avejentando mi espíritu, ese que por mucho me hizo fuerte y me hizo llegar hasta aquí. Estoy cansado a mi corta edad, no hallo si rendirme o pelear aun mas, por lo que quiero, por esa felicidad que cada día la veo mas difícil y que e llegado a pensar que tal vez nunca llegara.
Cada minuto que pasa, es un mismo minuto que se acaba y un mismo minuto en el que fracase, en el que no lo logre, en el que no alcancé a resolver nada. Y a cada minuto mas crece mi agonía y me infelicidad.
Siempre sonreír, siempre hacer creer, que todo va bien, y que por aquí no pasa nada, no agachar la cabeza ni la mirada ante los demás pero cuando solo estoy, quebrantarme y mostrar que tan frágil soy, que tan desdichado puede ser un ser humano, cuando no se tiene nada,. No creo ser mala persona para que se me pongan pruebas tan difíciles y tan repetidas una de otra, apenas voy planeando salir de una, cuando otra ya esta encima, muchas veces me dijeron que esas pruebas eran puestas para gente fuerte, para gente que tiene el valor de enfrentar una y otra y otra vez, “pruebas” puestas para ser buenas personas, pero no soy malo, como para aguantar una tras otra, y el cansancio ya es notorio en mi aspecto y a cada paso, que doy mas pesado es mi avanzar, ya no puedo mas y reniego de tantas pruebas, y reprocho tanto padecer y sufrir que llevo conmigo.
Reprocho a la vida misma por tratarme así, por permitir que mi ser se desangre y por hacer creer a mi fe que todo es de balde, que de nada sirve tanta lucha, tanto esfuerzo, cuando al final siempre habrá una prueba aun mas difícil que la anterior y tal vez la prueba que acabe con mi vida, que mate mi ilusión y fulmine las ganas de seguir viviendo.
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